La Marta es uno de los grandes colosos del occidente asturiano y el puerto de paso con mayor desnivel acumulado de toda Asturias, con casi 1500m de desnivel en 27kms.
Otra característica de este puerto es que pese a estar situado en el centro del occidente asturiano, es una zona remota en la que para ascenderlo en una ruta circular esta se va como mínimo a los 3000m de desnivel.
En esta ruta decidimos salir de La Espina y enlazar La Marta con Brañuas, para hacar un total de 150kms y 3500m de desnivel acumulado.
Otra característica de este puerto es que pese a estar situado en el centro del occidente asturiano, es una zona remota en la que para ascenderlo en una ruta circular esta se va como mínimo a los 3000m de desnivel.
En esta ruta decidimos salir de La Espina y enlazar La Marta con Brañuas, para hacar un total de 150kms y 3500m de desnivel acumulado.
 |
| Rumbo a La Marta |
Salimos de La Espina poco después de las 9 de la mañana. La grupeta de hoy la formamos Pablo, Luis y yo. La temperatura es fresca y lo primero que nos esperan son unos 10kms de descenso por un valle sombrío.
Finalizamos el descenso y tenemos otros 10kms de falso llano descendente hasta llegar a Brieves. Se agradece empezar a pedalear y poder ir entrando en calor.
En Brieves nos desviamos hacia Navelgas. Nos esperan 20kms por una carretera quebrada llena de repechos y sin un metro llano.
Vamos superando diferentes valles y pueblos, algunos de ellos realmente preciosos.
Algunas de las subidas que nos vamos encontrando es bastante dura. La última de ellas supera los 2kms a más del 8% de media. Habrá que volver a pasar por aquí un día con más calma para hacer alguna altimetría de estas subidas.
Llegamos a Naraval y nos incorporamos a la general. Nos quedan unos 3kms para llegar a Navelgas con un nuevo repecho por el medio.
La primavera empieza a lucir espectacular, con un verde que por momentos deslumbra.
En Navelgas paramos a tomar un café y llenar los bidones. Hasta Pola de Allande no vuelve a haber ningún bar y para llegar hasta allí aún nos quedan muchos kilómetros y muchos metros de desnivel.
Tras el café cogemos la carretera que lleva a Villayón por el alto de Brañuas. Los primeros 8 kms son de falso llano para ir ganando altura lentamente por el valle.
El valle es precioso y luce todavía más en esta época.
Llegamos al final del valle y comenzamos a subir a Brañuas. Por esta vertiente son unos 5kms a casi el 9% de media.
El puerto tiene un trazado precioso. Vamos ganando altura por la ladera a base de herraduras, que casi siempre rondan, o superan, el doble dígito.
Al llegar a Burgazal disfrutamos de un breve descanso de unos 500m, lo justo para aligerar un poco las piernas.
Al fondo del valle adyacente podemos ver el Collado Santiellos, que es el último collado que hay antes de coronar La Marta, y al que por este valle se accede por una pista de tierra.
La parte final del puerto está totalmente deslucida ya que ha sido arrasada por un incendio forestal hace poco más de un mes.
Coronamos Brañuas y ya llevamos más de 1300m de desnivel acumulado en menos de 55kms.
La bajada hacia Villayón es preciosa. La carretera va a media ladera y las vistas son brutales. A nuestra izquierda podemos ver prácticamente completa la subida a Bustantigo.
Pasamos también al lado del precioso molino de Pímpano.
Tras algo más de 18 kms de descenso llegamos a Puente Polea. Y sin un metro llano por el medio comenzamos la ascensión de La Marta. Nos esperan 27kms de subida.
Los primeros 500m son durísimos, con rampas constantes al 12-13% y esta espectacular herradura donde, como siempre, toca posturear un poco, jaja.
Nos quedan algo más de 5kms para llegar a Lendequintana. La pendiente va a rondar el 8-9% todo el tiempo.
Subimos a ritmo tranquilo y charlando, y antes de darnos cuenta estamos en Lendequintana.
Mientras atravesamos el pueblo vemos con sorpresa que el bar está abierto. Son las 14 y aún nos queda un montón para llegar a Pola de Allande, así que decidimos parar a tomar un refresco.
Proseguimos la ruta. tras Lendequintana aún tenemos un kilómetro duro antes de afrontar al bajada al arroyo Batadoira.
Comenzamos la segunda parte de la ascensión. Tenemos que superar 3kms al 10% de media para llegar al pueblo de Bustantigo.
En el primer kilómetro se concentran las rampas más duras, superando el 15%.
En el primer kilómetro se concentran las rampas más duras, superando el 15%.
Duro, durísimo, pero disfrutando siempre, jaja.
Justo antes de llegar a Bustantigo tenemos un mirador espectacular donde podemos ver todo el valle y parte de la vertiente de Brañuas que acabamos de bajar.
Llegamos al pueblo de Bustantigo. En la ladera de enfrente podemos ver los restos de las explotaciones mineras romanas, que extraían el oro de estas tierras.
El paso por Bustantigo es precioso, lleno de praderas y árboles autóctonos.
Continuamos hacia el alto de Bustantigo. Nos quedan unos 3kms al 9% que se hacen duros con todo lo que llevamos ya encima.
Este tramos se hace muy duro mentalmente, porque parece que se ve la cima, pero tras cada vaguada ésta aparece más arriba.
Coronamos el alto de Bustantigo. Un verdadero coloso, y todavía nos queda llegar a La Marta.
Los primeros 3kms del trayecto hacia La Marta son de descenso por un valle interior.
Se pasa por el ultramítico pueblo de El Rebollo.
Comenzamos de nuevo a subir y dejamos a nuestra derecha la Braña del Campel.
Nos quedan 7kms para llegar a La Marta. Los primeros 4 la carretera va a media ladera con pendientes muy suaves. El día esta despejado y las vistas desde aquí son brutales.
Al fondo vemos la carretera cortando la ladera hasta llegar al collado donde está la cima de La Marta.
Este tramo tiene pendientes muy cómodas, pero para contrarrestar encontramos un viento frontal brutal que nos deja clavados.
Postureo number 2, jaja.
Este precioso tramo también ha sido arrasado por el fuego. Cada vez luce más pedreros en sus laderas y en unos años será como el Mont Ventoux, sin una brizna de vegetación.
Coronamos La Marta con casi 2900m de desnivel acumulado en tan sólo 95kms. Y eso que los primeros 20kms fueron de descenso.
Tenemos que bajar ahora hacia la carretera del Palo.
Por fin llegamos a Pola de Allande. Son casi las cinco de la tarde y el hambre ya me ciega.
No tenemos muy claro por donde volver a La Espina. Al final decidimos hacerlo por la carretera que va de Pola de Allande a Tineo. Esta carretera la conocía sólo parcialmente y en el otro sentido, así que perfecto.
Los primeros kilómetros son de subida, con pendientes suaves y bonitas vistas.
Tras coronar en Campo del río tenemos varios kilómetros de suave falso llano descendente. Tras un motón de kilómetros de duras pendientes donde había que apretar fuerte los pedales para avanzar, es un lujo poder ir a más de 30kms/h sin apenas dar pedales. Entre esto y las vistas voy gozando como un enano.
Al llegar a Gera comenzamos una nueva ascensión. Aún no sé porqué, pero nos pegamos un calentón tremendo en esta subida, jaja.
Es rara la ruta en la que no hay pueblos con nombre curiosos.
Llegamos a Tineo y desde allí nos quedan unos 10kms, con algún tobogán, para llegar a La Espina.
Llegamos a La Espina y estoy más que satisfecho. Ha sido una ruta preciosa y además he acabado bastante fresco para los números que hemos hecho. Aunque, como siempre, lo mejor ha sido la compañía.
tienes disponible la ruta en strava para copiar el trayecto?
ResponderEliminar