Primera visita del año al occidente asturiano. Espero que tras el infausto 2020 sea la primera de muchas en este 2021. La ruta era relativamente sencilla para lo que es el occidente asturiano, pero aún así se fue a más de 2000m de desnivel acumulado en poco más de 100kms.
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| El valle del Navia en todo su esplendor |
Salimos de Navia sobre las 10 de la mañana. La grupeta la formamos Carlos, Luis y yo. La temperatura es fresca aún pero se ve que va a hacer calor, y más para la época del año en la que estamos.
Los primeros kilómetros son de falso llano muy suave, siempre dejando a nuestra izquierda el río Navia. El valle es muy abierto y vamos encontrando restos del teleférico que llevaba los materiales a Grandas para la construcción de la presa.
El terreno es muy pestoso. Va picando constantemente hacia arriba y se alternan kilómetros suaves con alguno más duro que ronda el 6-7% de media.
A nuestra izquierda dejamos la presa de Arbón y seguimos remontando el valle del Navia.
Llegmaos a Boal. No se puede decir que subir hasta aquí sea un puerto, pero acumulamos 700m de desnivel en 25kms.
Las casas de indianos de Boal contrastan con las casonas de arquitectura tradicional que encontramos en las aldeas.
De Boal bajaremos a la presa de Doiras donde comenzaremos a subir a La Bobia. Nos esperan unos 19kms al 6% de media.
El comienzo del puerto es espectacular, en una zona muy angosta del valle, para dejar paso a otra zona mucho más abierta. Las pendientes son muy suaves, poco más que un falso llano.
Según vamos avanzando la pendiente se va incrementando poco a poco. Llegamos a Cachafol, donde hay una cascada muy guapa. Además es la primera vez que la pillo con agua.
Al llegar al área recreativa de Folgueirou nos desviamos a la derecha. La carretera se estrecha y la pendiente aumenta hasta rondar el 10%.
Vamos ganando altura por la ladera y las vistas del valle del Navia son espectaculares.
Llegamos a una zona de praderas con pendientes muy suaves que nos ayudan a coger algo de aire.
Tenemos algo más de un kilómetro duro para coronar un primer collado situado en la Sierra de San Isidro.
Tras un kilómetro de descenso afrontamos el tramo final de la subida. Nos quedan algo menos de 3kms con pendientes suaves exceptuando alguna rampa puntual.
Este tramo, ya metidos en el corazón de la Sierra de La Bobia es precioso.
Como siempre ocurre aquí, la sensación de soledad es total.
Por fin llegamos a la estación eléctrica que marca el final de la subida. Las sensaciones hasta aquí han sido muy buenas, pero empiezo a notarme cansado ya que no tengo nada de fondo aún.
Ahora toca crestear por la carretera que atraviesa la Sierra de La Bobia. Es uno de los tramos más escénicos que se pueden hacer en Asturias.
Llegamos al Campo a Bobia y nos desviamos a la derecha. Comenzamos a bajar mientras a nuestra izquierda vemos la vertiente de Penzol/Arco.
De nuevo estamos ante un tramo tremendamente escénico donde vamos viendo el mar a nuestra izquierda y también varias de las vertientes por las que se puede ascender a La Bobia.
La carretera está en un estado perfecto y vamos disfrutando de cada pedalada ya que las vistas son amplísimas.
Nos acercamos a Penouta, que por este lado son sólo unos 2kms al 6%, pero voy en las últimas. Menos mal que me da Carlos un sandwich porque si no no subo.
Tras coronar Penouta sólo queda bajar a Navia. Me despido de Calros y Luis que van a bajar más rápido ya que llevan prisa y yo, como voy en las últimas, me voy a dejar caer intentando no dar un pedal más, jaja.
A mitad de la bajada hacia Navia para en el mirador del Castro de Pendía. Han sacado madera de la zona y ahora se puede ver desde el mirador, cosa que no se podía hacer la última vez que pasé por aquí...
Llegando a Navia vuelvo a pasar al lado del Castro de Coaña.
Y llego a Navia destrozado, pero más que satisfecho. Ya había ganas de poder hacer una ruta así.
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